Incluso en nuestro momento actual de jazz, cuando la forma de arte es mundial y vital, los álbumes que llegan como sorpresas completas son relativamente raros. tres segundos | Kolme Toistá es una maravilla.
Jussi Reijonen ha lanzado solo una grabación anterior (Naciones Unidas, hace nueve años). Es un guitarrista y ejecutante de laúd finlandés que también ha vivido en Jordania, Tanzania, Omán, Líbano y Estados Unidos. Es posible que nadie haya ensamblado nunca un noneto como el que se muestra aquí. Hay tres estadounidenses (el trompetista Jason Palmer, el baterista Vancil Cooper, el bajista Kyle Miles), dos turcos (el trombonista Bulut Gülen, el pianista Utar Artun), un jordano/iraquí (el violinista Layth Sidiq), un palestino (el violonchelista Naseem Alatrash) y un Japonés (percusionista Keita Ogawa).
tres segundos es una suite de cinco partes que te atrapa desde las notas iniciales del primer movimiento, «El velo». Una fanfarria inquietante y premonitoria es presentada por Miles en bajo arco. Ese tema se convierte en una presencia dramática inminente cuando toda la banda se hace cargo. En este trabajo multidimensional de 42 minutos, Reijonen, como compositor/arreglista, tiene muchas sonoridades disponibles. Combina los colores con audacia. La música suena tanto personal como majestuosa. Su primera impresión es de potencia, cuando el conjunto, con sus dos bateristas atronando, golpea con toda su fuerza. Sin embargo, hay muchos momentos en los que el mundo sónico expansivo de Reijonen se contrae hasta los detalles más finos: el violín de Sidiq lamentándose suavemente en “Transient”; la guitarra de Reijonen sola en los espacios abiertos de “La Tejedora”; Anuncios de trompeta de Palmer en “Verso”.
La variedad de etnias e instrumentos crea una mezcla única y embriagadora. Entre las muchas revelaciones de este álbum está la comprensión gradual de que realmente es una suite. Ese tema enigmático del principio se repite en todo momento, aunque a veces de manera subliminal. Cuando vuelve explícitamente, como al final de “Verso”, es un apuro. Este álbum es una declaración única, unificada, diversa y abrumadora.